Paredes recubiertas con lujosos plafones de madera de cerezo, delicados artesonados, cómodos sillones de cuero antiguo y sobretodo una atmósfera clásica que lo invade todo con un color, un calor y un aroma característicos: es el perfume a viejos tiempos, a épocas preteritas llenas de buenas vibraciones. Estamos -de eso no hay ninguna duda- ante uno de los mejores bares del mundo.
La cuidadosa restauración reciente le ha devuelto la prestancia de los viejos tiempos en que el gran Ernst Hemingway frecuentaba el lugar y cumplía su ritual bebedor.
Los mejores whiskys de malta del mundo en una lista inabarcable para la memoria humana. Los mejores cócteles de la mano de Colin P. Field son una obligación. El Kashenka -mezcla de vodka polaco y fresas- el Benderitter -champgne y extracto de jenjibre-... todo un mundo de sensaciones a un precio elevado, eso sí; pero GEORGE te asegura que vale la pena.
Un rincón acogedor e intimo que todo bebedor con clase desearía encontrar en todo lugar del mundo pero que ¡ay! no es fácil. Un lugar exclusivo pero no amenazador en que dejarse llevar por el tiempo mientras se saborea un cóctel, se contemplan las viejas fotos del escritor y los oídos se dejan emblesar por la delicada música de piano y las ricas voces de las conversaciones de sus moradores. Sin duda, un verdadero placer.
Para más información: http://www.ritz-paris.com/