THE ROYAL SCOTSMAN, UN VIAJE DE LEYENDA

Los viajes de leyenda todavía existen. Basta con desplazarse a la capital de Escocia, Edimburgo, y una vez alli presentarnos en la imponente estación de Waverley. Allí es donde comienza una de las más maravillosas aventuras de nuestra vida: THE ROYAL SCOTSMAN.

El majestuoso convoy aguarda a los 36 exclusivos huéspedes que se acomodarán en sus amplias cabinas para ponerse en marcha rumbo al corazón de las tierras altas escocesas y compartir una privilegiada y exclusiva experiencia viajera.

Mullidos sillones del coche bar en donde saborear un whisky de malta o fumar un cigarrillo en la traqueteante plataforma de observación al aire libre son experiencias únicas que sólo en este tren podremos vivir.

Su deliciosa estética eduardiana y su plácida tranquilidad nos permitirán dejar volar la vista y la mente a través de sus ventanas.

La flemática bienvenida del director del tren ya es un espectáculo digno de otros tiempos, cuando el buen gusta, las refinadas maneras y la distinción eran sinónimo de educación. El delicioso servicio de té a media tarde, servido en juego de plata acompañado de los consabidos sándwiches de pepino y bizcocho recién horneado está pensado para que quien viaje en él se lleve a su hogar una delicada selección de recuerdos y sensaciones.

Sus amplios camarotes con mayordomo exclusivo. Sus dos vagones restaurante, denominados Raven y Victory, dispuestos para sentarse en pareja o en grupos de cuatro personas propiciando así la tertulia entre los viajeros para que todos se sientan en su casa como si de invitados de honor en una mansión de la campiña se trataran. Todo es un regalo para los sentidos de las almas sensibles. Incluso este último vagon fue utilizado por el Primer Ministro Sir Winston Churchill en 1945 para celebrar reuniones y trabajar en su programa electoral para la campaña que precedió a las primeras elecciones generales que se celebraron en Gran Bretaña tras la Segunda Guerra Mundial.

Aunque THE ROYAL SCOTSMAN tal como lo conocemos hoy comenzó a funcionar a principios de los años ochenta del pasado siglo no fue hasta 2004, cuando la prestigiosa compañía ORIENT-EXPRESS empezó a gestionar el servicio que le fue devuelto este halo supremo de exclusividad.

La compañía inició un proceso de restauración de piezas del mobiliario, paneles, telas, marqueterías de caoba de los vagones, algunos con más de sesenta años de antigüedad. Se incorporó la tecnología actual, así como aire acondicionado y se construyeron cuartos de baño completos en cada cabina.

Tres empleados por cada pasajero hacen posible la magia de este viaje. Un servicio impecable de restauración donde degustar pescado ahumado de Inverawe, vieiras de Kyle lochalsh, salmón salvaje del rio Tay o ternera Angus de Aberdeen, todo acompañado de verduras y cocinado en un alarde de precisión por el chef y sus dos ayudantes de cocina.

Podemos optar por un recorrido de dos hasta siete noches en los que recorreremos las Highlands escocesas, incluyendo la bella ciudad de Inverness. Si optamos por el recorrido más largo disfrutaremos del espectacular West Highland, la línea ferroviaria más impactante de Europa. Sus paradas nos permiten pasear al atrdecer por las increíbles playas de arena blanca de Morar, pasear y visitar Mount Stuart la más impresionante mansión victoriana de Gran Bretaña, que se alza, rodeada de magníficos jardines en la isla de Bute.

Evidentemente no se trata de un viaje económico pero vale la pena -al menos una vez en la vida- darse un capricho de esta categoría. Solo se trata de subir al convoy y dejar volar la vista. GEORGE una vez más te lo recomienda y te asegura que la experiencia no te dejará indiferente. Vívela y verás que la vida la precibirás de un modo distinto a partir de esta experiencia.

Para más información:

http://www.royalscotsman.com/