viernes, 6 de junio de 2008

UN CLÁSICO VENECIANO: HARRY'S BAR

Pequeño, incómodo, con un mobiliario demodee y en un estado de conservación que deja mucho que desear... Pero cuando GEORGE va a Venecia no puede dejar de ir allí... al igual que les ocurre a todas las personalidades que visitan la ciudad y a las estrellas de cine que aparecen por la ciudad de los canales durante la Mostra de Cinema.

El HARRY'S BAR es un lugar con encanto. A pesar de sus apreturas, tiene un sabor especial y cumplir los ritos inevitables se convierte en una tradición obligada. Al Harry's Bar se va a cumplir los tres obligatorios: pedir un Bellini, un Garibaldi y comer un Carpaccio preparado por Giuseppe Cipriano hijo.

El Harry's fue fundado por Giuseppe Cipriano en 1931 y financiado por el bostoniano Harry al que debe su nombre. Para colocar el bar escogieron un viejo almacen de la calle Varesso, al final del Gran Canal y cerca de la Piazza San Marco.


Desde su inaguración se convirtió en centro de peregrinación de norteamericanos; Ernest Hemingway,-el bebedor más famoso de América-, Truman Capote, Scott Fitgerald, Aristoteles Onassis, Charlie Chaplin, Orson Welles, Peggy Guggenheim, Noel Coward, Cary Grant y Barbara Hutton se convirtieron en incondicionales del local.

En 1948 Cipriani creo el cocktail Belllini en honor del pintor Giovanni Bellini del cual ese año se realizaba una exposición en la ciudad.
El Bellini es un cocktail a base de champagne brut y puré de melocotón. Al principio la pulpa de los melocotones blancos del Véneto se obtenía por la presión ejercida con las manos. Hoy se ha refinado mucho e incluso se ha cometido la osadía de embotellarlo -aberración insultante para toda alma sensible-.

El Garibaldi se trata de una mezcla de bitter Campari y zumo de naranja recién exprimida.


No tan popular pero absolutamente favorito por GEORGE es el "Dry al estilo Monty".

Descrito por Hemingway en su novela "Al otro lado..."

"Quince partes de ginebra seca y una parte de vermut, es decir, quince a uno, ya que según dicen los entendidos en temas bélicos, Montgomery nunca entra en batalla si su ventaja no es quince a uno".

La creación del Carpaccio se debe a una historia muy curiosa: en los años 30, una clienta del bar, la condesa Nani Mocenigo explicó a Cipriani que el médico le había recomendado comer carne cruda por problemas de salud. Cipriani cortó en láminas finísimas un trozo de solomillo de buey que tenía en la cámara; lo dispuso en un plato y lo condimentó con una salsa mayonesa mezclada con mostaza, salsa worcester y unas lascas de parmiggiano reggiano. Cuando la condesa le preguntó por el nombre del plato, Cipriani lo bautizó con el nombre del pintor italiano Vittore Carpaccio al cual la ciudad le estaba ofreciendo en aquellos momentos una exposición y según su creador le recordaba a los cuadros por los tonos rojizos de la carne y amarillentos del queso y la salsa.

A partir de aquel momento la fama del plato se ha ido extendiendo y ennobleciendo o degradando según la sensiblidad y la osadía del chef de turno.


Hoy el Harry's ha sido declarado "monumento protegido" por el Ministerio de Cultura italiano.
Felicidades al viejo y entrañable local veneciano de parte de un incondicional suyo: GEORGE.


7 comentarios:

Anónimo dijo...

çok iğrenç yemekler bence bven yemem asla

Anónimo dijo...

no conocía la historia del carpaccio ni la del harrys bar.

Muy interesante

Anónimo dijo...

hace un par de años estuvimos en Venecia y cometímos la torpeza de acceder al Harry's bar y pedrinos dos Bellini y a continuación quedarnos a cenar el famoso carpaccio y una ensalada (mi mujer y yo) de postre un helado de vainilla y dos "ristrettos"

La "clavada" alcanzó los 126 euros, iva incluido.

Será muy monumento nacional pero hay tipos (me refiero a los dueños del local) que deberían meterlos en la cárcel

P.D.-para más inri, el local es sucio, feo, descuidado y los lavabos indignos de un país del primer mundo.

CONCLUSIÓN:UNA MIERDA

Anónimo dijo...

LO DE EXPRIMIR MELOCOTONES CON LAS MANOS ME PARECE UN POCO ASQUEROSO, LA VERDAD. EN EL ESPAÑA NO TOMAMOS BELLINIS DE ESOS PERO MI CUÑADO ES MUY LIMPIO Y SU MUJER (O SEA MI CUÑADA) LOLI Y MI SARA NO LE PERMITIRÍAN EXPRIMIR LA FRUTA CON LAS ZARPAS.

ADEMÁS, LA CLIENTELA NO LO APRECIARÍAN NADA Y LE SEGUIRÍAN PIDIENDO CUBATAS.

Anónimo dijo...

eS MUY INTERESANTE LA HISTORIA DEL CARPACCIO. NO LA CONOCÍA.

Anónimo dijo...

MUY INTERESANTE, SIN DUDA.

yanmaneee dijo...

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